El Frente de Todos confía en que este miércoles obtendrá las firmas a favor al proyecto en la Comisión de Presupuesto. En el interbloque de Juntos por el Cambio creció la postura de habilitar la sesión, pero ahora discuten si rechazarán el proyecto o se abstendrán en la votación.
Por Miguel Jorquera para Página 12
Todo está listo para que el oficialismo avance en su intento de aprobar el Presupuesto 2022 en la Cámara de Diputados. El Frente de Todos confía en que hoy reunirá las firmas para obtener el dictamen de mayoría en la Comisión de Presupuesto que fue convocada para las 14 y la bancada ya pidió oficialmente la convocatoria de una sesión especial para llevar el jueves al recinto el proyecto de cálculo de ingresos y egresos que dispondrá el Estado nacional el próximo año. En el interbloque opositor de Juntos por el Cambio cobró más peso la postura de dar quórum en la sesión, aunque la discusión interna se trasladó a si toda la alianza se manifiesta en contra o se abstiene a la hora de votar –lo definirían hoy–. En ese contexto, el oficialismo deberá garantizar el respaldo o la abstención de otros bloques menores para conseguir la aprobación del presupuesto.
La discusión política corre en paralelo al duro debate económico que estos tres días (desde el lunes hasta hoy) se está dando en la Comisión de Presupuesto de la Cámara baja. En el oficialismo había ayer optimismo en que podrá superar esta etapa y conseguir el dictamen favorable para la ley.
Distintos diputados del FdT confirmaron a PáginaI12 que ya disponen de las firmas necesarias para alzarse con el dictamen de mayoría en la numerosa comisión que cuenta con paridad de fuerzas entre oficialismo y oposición. Aunque nadie arriesgó detalles de cómo se conformaría esa mayoría. Muchas de esas decisiones se resuelven fuera de la Sala del segundo piso del Anexo C de la Cámara baja donde se desarrollaron las exposiciones de los funcionarios y la discusión presupuestaria.
La cita de hoy para los integrantes de la comisión fue pautada inicialmente para el mediodía pero poco después se trasladó para dos horas más tarde. Allí volverán a mezclarse el debate económico y el político alrededor del Presupuesto. Incluso podrían adelantarse las posturas que asumirán los bloques mañana en el recinto.
Con la certeza de que conseguirá el dictamen de mayoría a favor del cálculo presupuestario del Gobierno, el FdT solicitó la convocatoria a una sesión especial para mañana al mediodía para tratar el presupuesto. La misiva dirigida al presidente de la Cámara, Sergio Massa, lleva la firma del jefe del bloque oficialista, Máximo Kirchner, y 32 diputados de su bancada, entre ellos los que integran la Comisión de Presupuesto.
Con la nueva composición de la Cámara baja, los números son más ajustados para el oficialismo que antes del recambio parlamentario del 10 de diciembre. El FdT tiene 117 diputados propios (más uno pendiente de incorporar) y con escasas posibilidades de conseguir aliados en el archipiélago de bloques opositores.
Con la importancia que adquiere para las provincias la sanción del presupuesto, el FdT podría sumar a los 4 diputados que conforman el Interbloque Provincias Unidas que incluye a los oficialismos de Río Negro, Misiones y Neuquén.
Los opositores también le cuentan las costillas al oficialismo. Según algunos de sus cálculos, el FdT podría contar con 124 votos a favor del presupuesto. Un número todavía lejano de la necesaria mitad más uno de la Cámara (129 diputados) para al alcanzar el quórum, abrir la sesión y garantizar la aprobación presupuestaria. Por lo que será decisiva en la sesión la postura que adoptará todo el resto del arco opositor.
Atrás parecen haber quedado los primeros vaivenes entre los integrantes de JxC, que dividían opiniones entres quienes se manifestaban a favor de aportar el quórum para sesionar y los que proponían dejar al oficialismo en soledad en el recinto. Ahora parece primar en la alianza la idea de dar quórum para sesionar a pesar de algunas opiniones todavía en contra, como la de Ricardo López Murphy.
Las posiciones que asumieron a favor de dar quórum el macrista Luciano Laspina y el radical disidente Martín Tetáz fueron ganando fuerza, especialmente por sus argumentos: impedir la aprobación del Presupuesto significaría que el Gobierno estaría dispuesto a “reconducir” por decreto presidencial el presupuesto de este año, con lo que según los opositores “dispondría de mayor discrecionalidad para distribuir los recursos económicos”.
Por eso trocó la discusión dentro del interbloque de JxC (hoy formado por diez bloques y monobloques). Ahora el debate pasa por dos opciones: rechazar el presupuesto o abstenerse en la votación. Esta última postura fue expuesta con más fuerza por los diputados de la Coalición Cívica, con el mismo argumento: si toda la oposición rechaza el proyecto le reabrirían al Gobierno la posibilidad de prorrogar el actual presupuesto. De todas maneras, el interbloque opositor buscará hoy la forma de llegar a un acuerdo y asumir una postura común. Habrá que ver si también lo logra.