El oficialismo consiguió las firmas necesarias para que sea discutido este jueves. Por el momento, no cuenta con los votos para aprobarlo. Las negociaciones con la oposición.
Por María Cafferata para Página 12
En un panorama legislativo complicado, el Frente de Todos logró reunir las firmas necesarias para obtener dictamen de mayoría del Presupuesto 2022. Gracias al acompañamiento del misionero Diego Sartori, el oficialismo cerró positivamente el frenesí de reuniones de comisión de los últimos tres días y se prepara para debatir, este jueves al mediodía, el proyecto en la Cámara de Diputados. El escenario, sin embargo, no anticipa ser auspicioso para el oficialismo ya que, pese a la cincuentena de modificaciones incorporadas a último momento, gran parte de los bloques opositores minoritarios (agrupados en el Interbloque Federal) adelantaron que votarán en contra. La Coalición Cívica, que había anticipado que se abstendría, terminó cambiando de postura y anunció que votaría en contra. El oficialismo se aprestaba así, durante las últimas horas de la noche, a ir a la pesca de los votos faltantes. El final, tanto para el oficialismo como la oposición, es aún incierto.
Modificaciones y poroteo
En un anticipo de lo que será la sesión del jueves, el debate arrancó picante, con el presidente de la Comisión de Presupuesto, Carlos Heller, anunciando las diferentes modificaciones introducidas al proyecto y la oposición, en la vereda de enfrente, cuestionando el tratamiento “express”. “No pudimos modificar todas las partidas, pero tenemos la perspectiva de que el crecimiento del 2022 será mayor al que sostiene el Presupuesto y eso posibilita que, manteniendo las metas del proyecto, podamos ir aumentando las partidas presupuestarias”, comenzó explicando Heller al introducir, durante 40 minutos, la cincuentena de cambios que había sido negociados en los últimos días con referentes de la oposición y las provincias. Uno de las más importantes, que había sido fuertemente reclamado por las provincias del Norte, fue el incremento en un 70 por ciento del Fondo de Compensación del Transporte Público. El aumento, que será de 27 a 46 mil millones de pesos, es una respuesta directa a los pedidos de los gobernadores peronistas que se habían reunido el martes con Sergio Massa.
La provincia de La Rioja, de donde es originario Felipe Álvarez (uno de los votos independientes que el oficialismo ansía conquistar), ganó un incremento de su partida presupuestaria, que llegará a 24 mil millones de pesos. A su vez, se autorizó llamar a licitación para el Canal de Magdalena, se ampliaron exenciones a los impuestos en combustibles y se anunció un régimen de regulación tributaria para provincias y municipios para que los contribuyentes puedan acceder a la condonación de sus deudas vencidas al 30 de noviembre. También se habilitó la creación de zonas francas en ciudades de frontera donde haya comercio bilateral, un pedido de los diputados misioneros que integran el interbloque Provincias Unidas y cuyo acompañamiento permitió la firma del dictamen. Si bien los dos misioneros y les otros tres diputades que integran el interbloque Provincias Unidas acompañarán el jueves el Presupuesto, el FdT aún está lejos de tener garantizados los votos para aprobar la Ley de Leyes.
De momento, el oficialismo tiene asegurados cerca de 124 votos entre propios y aliados, pero por fuera de eso el escenario se anticipa complicado. El interbloque Federal – que incluye a 8 diputades de Consenso Federal, Córdoba Federal y del partido Socialista – ya anunció ayer que votarían en contra, limitando ampliamente el espacio de maniobra. JxC, por otro lado, también votará en contra. Originalmente existía la posibilidad de que la Coalición Cívica se abstuviese, ya que quería evitar que el oficialismo prorrogase el actual presupuesto, pero finalmente confirmaron que votarán en contra. El resto de los bloques de JxC también anticiparon que no acompañarán, aunque persistía la duda sobre qué harán los radicales que responden a los gobernadores de Jujuy y Corrientes. “Vamos a hacer lo que decida el bloque”, indicó un diputado jujeño a este diario, pero incluso en JxC desconfían. “Morales se hace el anti k porque el viernes lo eligen rey del partido, pero yo quiero ver realmente si los jujeños votan en contra o se abstienen”, deslizó un integrante del bloque radical.
A las 8 de la noche, mientras el debate de comisión estaba finalizando, los presidentes de bloque de JxC se reunieron con el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa. “Ellos se imaginaron que tenían números que al final no existían y se acaban de dar cuenta que no les alcanza para aprobar el Presupuesto”, explicó un legislador opositor al finalizar el encuentro, en el que le solicitaron a Massa que patease el tratamiento. La sesión, sin embargo, sigue en pie para el jueves y el oficialismo se muestra confiado en que lograrán alcanzar los votos. “Vamos a ganar con un gol sobre la hora”, prometió una de las espadas del oficialismo a Página 12.
Firma de dictámenes
Finalmente, tras más de cuatro horas de debate, la Comisión de Presupuesto y Hacienda aprobó el dictamen de mayoría del oficialismo. El principal eje de discusión giró en torno a la proyección de la inflación – del 33 por ciento -, al que JxC calificó de ser “una fantasía”. “El FdT nos votó en contra todos los presupuestos y nosotros no hicimos eso. Pero hoy nos traen un Presupuesto que es irreal, con una inflación que no podemos convalidar bajo ninguna lógica razonable”, declaró el vicepresidente de la comisión, Luciano Laspina. Lo mismo sostuvo en sus entusiastas cuatro intervenciones Martín Tetaz (Evolución), que tuvo un pequeño traspié al comienzo del debate cuando le reclamó a Heller que explicase de dónde se iban a sacar los 180 mil millones pesos de más que se sumaban al Presupuesto debido a las modificaciones incorporadas. Heller le recriminó que esa información se la había dicho “en off” y Tetaz le terminó pidiendo disculpas (aunque la pregunta quedó en el aire).
En total, hubo tres dictámenes. Uno por la mayoría de la oposición, otro de minoría del Interbloque Federal y otro de minoría del bloque Evolución, que se cortó solo por fuera de JxC. Al final de la jornada, todes estaban sacando cuentas, inseguros aún de si el oficialismo conseguiría o no los votos. “Hay que persuadir”, repetían en el FdT.