Una alianza entre Irán, Rusia y China ha cambiando el balance de poder en el mundo, derribando el histórico sueño de EE.UU. de dominación total, detalla un artículo.
Después de la caída del muro de Berlín (1989) y la desintegración de la Unión Soviética (1922-1991), Washington se ilusionó con extender su dominación en el mundo entero, según un artículo publicado el domingo en la revista online Strategic Culture Foundation.
Estados Unidos, añade la publicación, concluyó que era la única “superpotencia” en el globo e ignoró las consecuencias que podría tener esa ilusión. Luego trató de propagar sus modelos cultural y económico en el mundo, utilizó la fuerza militar, bajo el pretexto de que era “necesario”.
Los tres mencionados países, no obstante, han llegado a entender que unión y cooperación entre sí son las únicas herramientas para hacer frente a un “problema mutuo”, representado por una creciente influencia de Washington en sus asuntos internos.
Esa verdad obligó a Teherán, Moscú y Pekín a resolver las diferencias y adoptar una “estrategia unificada” por el bien de los intereses comunes y la defensa de sus respectivas “soberanías”.
Según el artículo, acontecimientos como la guerra en Siria, los bombardeos contra Libia, el colapso del orden democrático en Ucrania, las sanciones contra Irán y una evidente presión sobre Pekín en el mar de China Meridional, han acelerado la unificación entre las naciones, que en los primeros años de la década de 1990 tuvieron poco en común.
El artículo destaca también el fracaso de Estados Unidos en las estrategias económicas que ha adoptado durante los últimos años. Como ejemplo, el artículo recuerda el Acuerdo de Asociación Transpacífico (TPP) y el Acuerdo Transatlántico de Libre Comercio e Inversiones (TTIP, por sus siglas en inglés).
Los mencionados acuerdos comerciales suponían marcar la supremacía económica de Estados Unidos, pero una economía alternativa de Irán, Rusia y China ha hecho que otras naciones revisen las propuestas económicas de Washington. El TPP ha sido sustituido por una zona de libre comercio en la región Asia-Pacífico (FTAAP, por sus siglas en inglés), una iniciativa china.
En el campo de la disuasión militar, Irán, Rusia y China también se han mostrado en contra del modelo estadounidense, mientras que “el imperialismo estadounidense” ha venido creando “amenazas existencuales”.
Luego del golpe de Estado en Ucrania (2014), la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) extendió su presencia hasta las fronteras rusas, al considerar Moscú como una “amenaza”. En Oriente Medio, las “destrucciones” de Irak, Libia y Siria han provocado la reacción de Teherán contra una alianza entre Estados Unidos y algunos de sus aliados regionales, mientras que en China, la tensión en el mar de China Meridional, ha causado un bloqueo comercial.
Fuente:cibersurvenezuela.blogspot.com.ar