El próximo 6 de noviembre comienza en Córdoba el juicio por la desaparición del joven chileciteño Gustavo Gabriel Olmedo, secuestrado en 1976, en plena dictadura militar.
Olmedo cursaba Ingeniería Civil en la Universidad Nacional de Córdoba, cuando fue detenido por fuerzas militares. Sus familiares fueron notificados el 1 de noviembre del inicio del juicio y lo comunicaron a través del siguiente escrito:
Comunicado de la familia Olmedo
Hoy primero de noviembre fuimos notificados que el día 6 de noviembre en la Justicia Federal de la ciudad de Córdoba se inicia el juicio a los represores que torturaron, secuestraron, dispusieron de su vida y lo desaparecieron a mi pequeño hermano Gustavo Gabriel, quien solo tenía 19 años de edad y cursaba tercer año de Ingeniería Civil en 1976.
Los que cometieron semejante atrocidad respondían a un régimen fascista totalitario que usurpó el gobierno democrático de entonces y que con soberbia pensaban que la desaparición de mi hermanito y de treinta mil almas más era un triunfo. Y hoy son juzgados por sus crímenes por las Instituciones del país como criminales, gracias al valor y compromiso de muchos argentinos que acompañamos a un siempre recordado y entrañable amigo, Raúl Ricardo, quien me acompañó en momentos difíciles de mi familia y por supuesto en mi gestión como presidente del comité de la provincia a quien siempre estaré agradecido.
Escucho decir, no fueron treinta mil, debo decirles a esos desinformados, que en esos años era muy difícil realizar los habeas corpus, por la falta de institucionalidad reinante, por dolor o simplemente por vergüenza. Fue terrible para nosotros como familia hacerlo en 1977, entonces pido respeto al dolor de las familias, porque en esa aseveración denostan nuestro dolor y nuestra lucha por la verdad.
Hoy debo decirles que mi hermanito no está físicamente pero vive en el cariño y el recuerdo de su familia, de sus compañeros de colegio, de sus amigos de la infancia de Los Sarmientos y de Chilecito todo, de los changos del club de Los Andes, de sus compañeros de militancia, etcétera. Es una victoria tuya mi querido hermano, después de 42 años podremos cerrar esta página de dolor por tu partida dispuesta por los agresores a la Patria. Como familia nos queda seguir bregando por obtener justicia por la cruz que les impusieron a nuestro hermano José Horacio, a nuestra cuñada Graciela Pujol y a nuestro sobrino nacido en cautiverio. Como nos decía nuestro padre Tomás jamás de rodilla claudicantes, de pie firmes con la mirada limpia, la mente despejada, sin odios ni rencores, defendiendo los valores morales, los principios, los ideales que nos vienen de Alem, Irigoyen, Sabattini, de nuestro abuelo Tomás Domingo, que más allá de los resultados ocasionales, siempre ha de ser una victoria la defensa de lo que representamos como humildes ciudadanos al servicio de la causa de los desposeídos de Alem, que son los descamisados de Perón, mas allá de las diferencias ideológicas.
En fin como miembros de la familia Olmedo de Los Sarmientos, Chilecito, provincia de La Rioja nos tocó ser perseguidos en la dictadura y discriminados por pensar distinto en Democracia, estamos cumpliendo 34 años de haber entregado una obra de viviendas que quedó inconclusa por razones obvias en la dictadura y que con el advenimiento de la Democracia se reiniciaron, se certificaron y se terminaron en el año 1984, y aun no podemos percibir el importe de los mismos. Los certificados fueron aprobados por el gobierno de entonces en el año 2005, en el 2013 dictamen jurídico aconseja que se pague y al día de la fecha todo sigue como en 1984, pensar distinto nunca ha sido fácil.
Mis queridos hermanos en donde estén sepan que jamás quebrarán nuestra dignidad, ni marchitarán nuestros ideales progresistas, como miembros de esta familia radical seguiremos militando, les cuento ahora estamos trabajando para rescatar a la UCR de la alianza amarilla cipaya a la que la condujeron los amantes del poder.