El servicio de justicia, la negociación con el FMI y la reconstrucción del federalismo fueron ejes del discurso de Alberto Fernández en el cierre anual del Consejo Económico y Social (CES). En ese sentido, el Presidente afirmó que es preciso “abrir una discusión honesta sobre el mejor diseño de la Corte Suprema de la Nación” y consideró que “las demoras en el servicio de justicia imponen revisar los mecanismos de trabajo, el número de integrantes, y su división de tareas”. En cuanto a la negociación con el Fondo dijo que requiere “la madurez, responsabilidad y sensibilidad de toda la dirigencia” política porque consideró que la negociación debe reunir “las expectativas de todos los sectores productivos” y bajar así los “niveles de pobreza”.
El encuentro, realizado en el Teatro Nacional Cervantes, mostró al Presidente rodeado de los integrantes del CES, con el secretario de Asuntos Estratégicos, Gustavo Béliz a la cabeza. Allí dijo que se debe “reconstruir el federalismo” y asumir el desafío “de volcar nuestras miradas hacia nuestras provincias y nuestros municipios y repoblar la Argentina con un sentido armónico en lo territorial y productivo en lo social”.
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El dioscurso presidencial fue un balance de los primeros 10 meses de trabajo del CES y presentó los desafíos para 2022, entre ellos lograr una organización económica mundial ambientalmente sustentable y el próximo envío al Congreso de la Nación de una serie de proyectos de ley sobre materia ecológica.
La referencia presidencial a la cuestión judicial incluyó no sólo el mecanismo de trabajo de los cortesanos sino también el número de integrantes. Una referencia que se hace en el momento que el Poder Ejecutivo debe enviar al Senado una propuesta de reemplazo de Elena Highton de Nolasco que renunció a su cargo en la Corte. Aunque también puede considerarse que fue un poco más allá al deslizar la posibilidad de incrementar la cantidad de integrantes de la Corte.
“Nadie tiene la razón absoluta en este tema porque se trata de armonizar posiciones que permitan consagrar una institución ejemplar por los años por venir”, sostuvo el Presidente, quien planteó además la necesidad de modificar a través de una nueva ley la conformación del Consejo de la Magistratura.
El Presidente destacó el acuerdo de renegociación de deuda con el FMI como parte de los asuntos que la Argentina tiene que resolver. “La madurez que necesitamos como país significa advertir que este tema exige responsabilidad y sensibilidad de toda la dirigencia”, señaló.
Entre los participantes estuvieron el rector de la UBA, Alberto Barbieri, la rectora de la Universidad Nacional del Nordeste (UNNE) Delfina Veiravé, el titular de la UOM, Antonio Caló, el secretario general de la Uocra, Gerardo Martínez, la presidenta de Mujeres de la Confederación Argentina de Mediana Empresa, Beatriz Tourn, el presidente de la Confederación General Empresaria de la República Argentina, Marcelo Fernández, el secretario General de UPCN, Andrés Rodríguez, el cosecretario general de la CGT, Héctor Daer, entre otros.
Minutos antes al evento de cierre de año del CES, el organismo en conjunto con el Laboratorio de Innovación e Inteligencia Artificial de la Universidad de Buenos Aires (IALAB), lanzó el Programa Multidisciplinario de Formación Básica en Datos e Inteligencia Artificial, un curso de capacitación pionero a nivel mundial para formar a 5000 dirigentes gremiales en Inteligencia Artificial (IA).
El mandatario agradeció el compromiso de todos los integrantes que participaron en el diseño de las nuevas políticas para el futuro del país. “Cuando pusimos en marcha esta experiencia inédita para nuestra vida democrática, apostamos al diálogo, a la unidad en la diversidad y a la armonía por encima del conflicto”, afirmó.
Durante su discurso, señaló el desafío de generar puntos de encuentro. En ese marco, volvió a plantear la necesidad de “reconstruir el federalismo” y reiteró su propuesta de trasladar la Capital Federal al interior del país para garantizar “otro polo de desarrollo” que permita “poblar a la Argentina con un sentido armónico en lo social y productivo en lo económico”.
En materia educativa, Fernández convocó “a todo el país a debatir una nueva escuela secundaria”, con eje en la “formación del trabajo del futuro”, y en la que prime una “cultura que respete las diversidades”. “El nuevo Pacto Social de la Argentina debe estar fundado en la solidaridad. No podemos seguir viviendo en una sociedad donde el crecimiento se concentra en pocos y la pobreza se distribuye en millones”, señaló hacia el final de su discurso.