El periodista Jorge Aldana Bardales, actual regidor de Tegucigalpa y Comayagüela, se convertirá en su próximo alcalde, luego de ganar las elecciones del domingo al favorito y actual diputado David Chávez Madison, del hasta ahora oficialista Partido Nacional.
Por Ezequiel Sánchez para Página 12
El aluvión de sufragios que convirtió a Xiomara Castro de Zelaya en la presidenta más votada en la historia de Honduras, sumado la disciplina de los militantes de Libre al momento de elegir las distintas papeletas, ayudaron a que se diera en Tegucigalpa -capital del país- la gran sorpresa de la jornada, con la victoria de Jorge Aldana por sobre el favorito y candidato nacionalista David Chávez, quien reconoció su derrota el lunes en la noche por twitter.
A pesar de que el portal del Consejo Nacional Electoral (CNE) no haya cargado en su portal ninguna información sobre los resultados en la elección de las 298 alcaldías que estaban en juego, los distintos partidos políticos han ido compartiendo las actas recibidas de manera electrónica, con las que se ha determinado que Aldana obtendría alrededor del 48 por ciento de los votos, contra un 32 por ciento del candidato oficialista.
Reconocimiento
Igual que en las elecciones nacionales, en tercer lugar con nueve por ciento quedó el candidato liberal, José Eduardo Martell, quien fue el primero en felicitar al ganador. Más tarde y también por redes sociales, aceptó su derrota el actual diputado David Chávez, quien en la noche del domingo se había declarado vencedor desde el bunker del Partido Nacional.
Recién después la felicitación pública de sus contrincantes, Jorge Aldana llamó a una conferencia de prensa el lunes por la noche en la sede del Partido Libre, donde junto a su vice alcalde -sumado por la alianza hecha con el partido Salvador de Honduras- prometieron solucionar “de una vez por todas el problema del agua en los barrios y colonias pobres de la capital”. Además se comprometieron a ordenar la ciudad, “que es la más importante del país y que hoy es un desastre y un desorden completo”.
Obras
El Partido Nacional pierde el gobierno de la capital después de cinco períodos consecutivos iniciados en 1997. Su actual alcalde, Nasry Asfura, se postulaba para la presidencia de la Nación compitiendo con la ganadora Xiomara Castro. “Papi a la orden”, como es conocido popularmente, basó su gestión en la trasformación vial de Tegucigalpa, levantando infinidad de puentes y viaductos -él es un empresario de la construcción- y mejorando el sistema de recolección de basura -se lo señala como accionista de la empresa de camiones-, pero destruyendo un montón de áreas verdes y postergando obras más necesarias en zonas con menos recursos. A principios de octubre, salió a la luz gracias a los Pandora Papers que siendo funcionario público, había sido el accionista mayoritario de una sociedad offshore en Panamá.
Los nacionalistas aparecían en las encuestas previas a los comicios como los favoritos a retener la alcaldía de la capital, pero el prepotente comportamiento del aspirante a alcalde David Chávez en dos momentos clave pudo haber hundido sus posibilidades. Primero, cuando se sorteó el orden en que aparecerían los candidatos en las papeletas electorales. Ese día llegó al Instituto Nacional de Formación Profesional (INFOP) con una turba de activistas nacionalistas que terminaron a las piñas e hiriendo a un candidato a diputado por el Partido Libre.
Alterado
Luego, en el cierre de campaña, subió al escenario en un estado alterado de conciencia -borracho como mínimo, sin olvidar a sus correligionarios condenados por tráfico de cocaína-, donde ni se le entendía lo que hablaba. Para colmo intentó justificarse posteriormente argumentando que a su micrófono le habían aplicado un efecto de delay, lo que originó una catarata de memes donde se burlaban de él y de sus excusas.
Su actuar, sumado al cambio discursivo en recta final de la campaña de Libre -”Un voto por Xiomara debe ser un voto por Aldana”-, terminó generando la mayor sorpresa de la jornada electoral, un histórico triunfo de la izquierda en un bastión de la derecha.
A nivel nacional, después de más de veinticuatro horas sin actualizaciones del escrutinio por parte del CNE, volvieron a cargar datos que confirman la tendencia de los primeros resultados. Hasta el momento del cierre de esta nota y con un 52 por ciento de las actas transmitidas, Xiomara Castro se mantenía con más del 53 por ciento de los votos, superando al nacionalista Nasry Asfura por veinte puntos.
Mayoría en el Congreso
También se mantienen firmes las posibilidades en el Congreso Nacional de que el partido Libre consiga la mayoría parlamentaria en alianza con el partido Salvador de Honduras. Comparten agenda en algunos temas como la intención de derogar el nuevo Código Penal o la calificada de anticonstitucional Ley de las Zonas de Empleo y Desarrollo Económico (ZEDE). Pero no tienen la misma postura ante otros planteos, como la promesa de Xiomara de despenalizar el aborto por tres causales.
Una vez que se termine el recuento definitivo de votos a nivel presidencial, municipal y legislativo, se pasará a la conformación de los gobiernos y el nombramiento de los funcionarios públicos, donde se empezarán a aclarar cómo se distribuirán los puestos entre quienes conformaron la alianza de fuerzas que permitió la victoria histórica de la izquierda en el gobierno nacional -primera presidenta mujer- y en las principales ciudades de Honduras.