Una resolución del Ministerio de Defensa autoriza al Ejército a realizar tareas de espionaje interno, una actividad que está prohibida por las Leyes de Defensa y Seguridad Interior. La medida habría sido tomada en respuesta a un pedido del Comando Sur de Estados Unidos.
Tras el regreso de la democracia se decidió separar con claridad las funciones de la Fuerzas Armadas (defensa ante ataques de otros países) y de las Fuerzas de Seguridad (seguridad interior, combate al delito, narcotráfico y terrorismo, etcétera). Para ello se crearon dos leyes (la Ley de Defensa y la Ley de Seguridad Interior), que determinan cuáles son las funciones y los límites de cada una de estas Fuerzas.
La medida tomada por el Ministerio de Defensa y publicada en el Boletín Oficial viola ambas leyes, ya que autoriza a las Fuerzas Armadas a realizar espionaje interno, una tarea destinada a las Fuerzas de Seguridad.
El Comando Sur del Ejército de Estados Unidos reclamaba esta medida hace años. La intención de controlar a las Fuerzas Armadas de cada país y, a través de estas, la situación interna y la presión política y social es uno de sus mayores anhelos. Los antecedentes de este tipo de situaciones se encuentran en la noche más oscura de América Latina, cuando todos los militares golpistas, dictadores, asesinos y torturadores de la región se formaban en la Escuela de las Américas, controlada por Estados Unidos. Desde allí se articularon todos los golpes de Estado sucedidos en el Cono Sur y Centroamérica y se ejecutaron los planes de exterminio político que dejaron como saldo miles de muertos y desaparecidos.
El pedido del Comando Sur había sido rechazado una y otra vez por el Gobierno argentino de Néstor y Cristina Kirchner. Pero el alineamiento automático del Gobierno de Mauricio Macri a cada uno de los pedidos de Washington (más allá de quien esté en el sillón de la Casa Blanca) le ha dado la posibilidad de tomar esta medida.
En diálogo con Contexto, la especialista en temas de geopolítica, estrategia y defensa nacional, integrante del Centro de Militantes para la Democracia Argentina (CEMIDA), Elsa Bruzzone, aseguró: “Esta resolución viola las leyes de Defensa y de Seguridad Interior. No sé puede decidir con un decreto que el Ejército haga tareas de inteligencia”.
“Esto va en línea con el pedido que el Comando Sur de Estados Unidos viene haciendo sistemáticamente a todos los países que somos parte del Sistema Interamericano de Defensa (SID). Hace tiempo que el Comando Sur viene solicitando que las Fuerzas Armadas intervengan en Seguridad Interior e implicarlas también en la lucha contra el narcotráfico y el terrorismo”, afirmó.
La especialista remarcó que “a los países que tienen leyes que impiden que las Fuerzas Armadas intervengan en Seguridad Interior, Estados Unidos les viene reclamando hace años que las deroguen, ya sea por un decreto o por una nueva ley”.
“La tarea de las Fuerzas Armadas es defender al país de una agresión exterior, para la seguridad interna están los otros organismos”, señaló.
Por último, Bruzzone recordó que “dado que el Gobierno es tan afecto a los Decretos de Necesidad y Urgencia y a las resoluciones de este estilo, nosotros hace un año venimos advirtiendo la posibilidad de que, entre gallos y medianoches, se impusiera una medida como esta”.