Gracias Cristina, mujer, hermana, compañera, conductora, artesana de caminos nuevos de justicia y dignidad para el pueblo.
Gracias compañera de Néstor, audaz precursor de insolentes transformaciones.
Gracias por ser militante de la Vida y la Esperanza, de que, aunque vengan arrasando con los sueños, Tú serás, sos, una vela resistente que nos ayudará a retomar caminos, sonrisas, abrazos de la Patria justa, libre y soberana, acechada por vientos de egoismos neoliberales.
Que tengas salud y alegria y nos sigas sembrando de Vida.
Somos tus compañeros. Salud!