Los Ministros Massa y Giuliano inauguraron un nuevo paso bajo nivel en Malvinas Argentinas.
En un momento del país en el que ellos plantean que hay que regalar las Malvinas, que hay que darle derecho y autodeterminación a los kelpers, nosotros desde acá, desde Malvinas Argentina queremos decirles a todos los argentinos que para nosotros nuestras Islas Malvinas fueron, son y serán argentinas, porque además nunca vamos a regalar la memoria de nuestros combatientes, la sangre de nuestros caídos, ni el orgullo y el honor de nuestro ejército, de nuestra Fuerza Aérea, de nuestra Armada Argentina, pero sobre todo de nuestra soberanía como Nación.
Decidieron rendirle homenaje con el nombre del viaducto Papa Francisco, a nuestro Papa que es el argentino más importante de la historia y que otros plantean que es un enviado del diablo a la tierra. Estamos orgullosos de que el Papa sea argentino, estamos orgullosos de haber puesto un argentino en un lugar en 2000 años de historia.
Este viaducto representa la unión de los argentinos. En un momento en el que, en la idea de la grieta, la división, la pelea, nos quieren dividir a los argentinos, nos quieren separar. Nosotros por este tipo de obras mostramos que tenemos vocación de unir. Esta obra une el centro cívico de Malvinas Argentinas con el centro comercial. Es ahorro de tiempo, de dinero. Ahora está pasando el tren, tendríamos que estar esperando la barrera. Ya no esperan más la barrera los vecinos de Malvinas. Ahora están unidos de un lado y del otro.
Si soy presidente, vamos a convocar a un gobierno de unidad nacional, porque para un argentino no hay nada mejor que otro argentino.
Aquellos que quieren dividir, exterminar, van a quedar en el pasado porque vamos a dar vuelta una página de la historia política argentina.
Ellos plantean que cada obra, cada calle, se tiene que repagar a través del bolsillo de los ciudadanos, porque no creen en la inversión pública como mecanismo de desarrollo de nuestras comunidades, tal vez porque no conocen el conurbano.
Somos argentinos que queremos vivir mejor y que queremos que se distribuya mejor la inversión pública en la Argentina. Somos los que peleamos por el agua, las cloacas, los túneles, los trenes, porque queremos tener calidad en nuestros servicios y porque queremos también un Estado presente y eficiente.
Fuimos de los primeros que nos animamos a invertir en prevención. Bajamos 93% el delito y además pusimos en marcha un mecanismo que nos permitió que otras ciudades de la Argentina nos imitaran. Yo quiero ser el presidente que le devuelva la plaza, las calles a cada argentino y argentina. Que el miedo sea de los chorros, no de los que laburan.
Tengan la tranquilidad de que en mí van a tener un tipo que cuando se sienta en cualquier lugar del mundo, fuera de la Argentina, lo único que piensa es en volver a la patria y poder mirar a los ojos a los propios, y eso es defender con orgullo y con convicción nuestra celeste y blanca.
Si mañana me muriera y volviera a nacer y tuviera que elegir dónde nacer, volvería una y mil veces a elegir la Argentina.
Eliminamos el impuesto a las ganancias de acá a fin de año, pero además le planteamos al Congreso eliminarlo definitivamente. Cambiamos el régimen de impuestos para las pymes y en los próximos días, más medidas para nuestras pymes, para que sigan generando empleo y para que paguen menos impuestos.
Para los monotributistas, tomamos la decisión de devolverle el IVA en la canasta básica a casi 14 millones de argentinos. Tomamos la decisión de aumentar a nuestros jubilados con un esfuerzo. Tomamos la decisión, además de seguir mejorando el ingreso.
El camino que voy a recorrer si soy presidente, que es el de la recuperación del salario de trabajadores, jubilados, autónomos, monotributistas.
En las próximas horas también vamos a tomar una decisión para beneficiar a esos profesionales, a esos comerciantes que trabajan y emprenden de manera autónoma y que están esperando una respuesta nuestra. Lo mismo quiero decirle a aquellos que hoy están fuera de la economía formal, casi 3 millones de argentinos, que no forman parte de la población formal registrada, pero que forman parte de la población económicamente activa.
Les quiero pedir, sobre todo a las mujeres, que vayan a hablar con sus vecinas, con sus amigas, con sus madres, con sus hijas, que les digan que no podemos pensar en vivir en una patria en la que se vendan armas libremente en el supermercado, que no podemos pensar en vivir en una patria donde se vendan los órganos de nuestro cuerpo como si fueran un juguete o un producto de supermercado, que tenemos que construir de la solidaridad un valor.
Tengo el coraje y la firmeza para cambiar lo que haya que cambiar y para unir a los argentinos.