El Resaltador (Córdoba)-Mediante un decreto, el Gobierno nacional desreguló el uso de drones para fumigación. Esta decisión tendrá impacto negativo en las tierras y en la salud de los pueblos. Dialogamos con Daniel Verzeñassi, integrante del Foro Ecologista de Paraná.
El Gobierno nacional, mediante el Ministerio de Desregulación y Transformación del Estado, emitió el decreto 663/2024, que permite que cualquier persona habilitada para utilizar un drone, también lo estará para fumigar.
En su cuenta de X, Federico Sturzenegger afirmó que los productores no van a ser regulados por el Estado y van a poder fumigar cómo, cuándo y dónde quieran. Sus dichos fueron respaldados por Milei en el palco de la Sociedad Rural Argentina.
En nuestro país se emplean distintos tipos de agrotóxicos para producir alimentos. No obstante, la desregulación y liberación de su aplicación impactará negativamente en la tierra y en la salud de los pueblos.
Se estima que en Argentina existen solo 50 drones fumigadores. A partir del reciente decreto, ese número podría aumentar hasta 500.
En diálogo con El Resaltador, el bioquímico e integrante del Foro Ecologista de Paraná, Daniel Verzeñassi, expuso que esta decisión política tiene como principal objetivo no solo fumigar, sino hacerlo de manera inadvertida.
«Estos drones, aéreos no tripulados, logran que, cuando van a intervenir como agentes de distribución de venenos, no sean percibidos, no tengan que contemplar lo que hoy la normativa les exige a las fumigaciones», agregó.
Para Verzeñassi, la iniciativa es el «sueño de Sturzenegger», que promueve «la mercantilización a costa de lo que sea: en este caso, la vida de quienes habitamos los territorios».
Al tratarse de drones, el bioquímico sostiene que no va a haber denuncias. «¿Cómo vamos a detectar su presencia? Uno podía ver la máquina fumigadora; sin embargo, ahora no hay forma de detectarlo, porque incluso a algunos de los venenos les han sacado la aromatización de su solvente para poder fumigar sin que sean percibidos por el olfato», explicó.
Las fumigaciones desreguladas no solo estarán habilitadas en el campo, sino también en áreas urbanas.
Al respecto, Verzeñassi argumentó que la aplicación de tóxicos mediante drones provocará resistencia biológica en cualquier ser vivo, situación que, presumiblemente, traerá efectos «desastrosos».
Fuente: MINKA Comunicación –