El sector empresarial estadounidense está en alarte por el avance chino en el mercado.
Fuente: Grok (creado con inteligencia artificial)
En los últimos años, grandes compañías de China han avanzado en el mercado norteamericano a través de la compra de empresas emblemáticas de Estados Unidos, generando un giro significativo en la economía global.
Este fenómeno no se limita a un solo rubro: el sector alimentario, tecnológico, automotor, inmobiliario y aeronáutico han sido parte de esta ola de adquisiciones. De esta manera, el capital chino ha ganado un lugar estratégico en el entramado empresarial estadounidense.
China compra compañías estadounidenses: Smithfield Foods: el punto de partida
Una de las primeras y más resonantes operaciones se dio en 2013, cuando la empresa china WH Group, antes conocida como Shuanghui International, adquirió Smithfield Foods por 4.700 millones de dólares.
Este acuerdo no solo involucró la firma productora de carne porcina más grande de Estados Unidos, sino también más de 59.000 hectáreas de tierras agrícolas. A pesar de que la sede se mantiene en oVirginia, la propiedad pasó completamente a manos chinas.
GE Appliances y la llegada de Haier
En 2016, el conglomerado chino Haier Group desembolsó 5.400 millones de dólares para quedarse con GE Appliances, la histórica división de electrodomésticos de General Electric.
Aunque la producción continúa en territorio estadounidense, la dirección empresarial se trasladó a China, como parte de una estrategia para liderar el mercado global de electrodomésticos.
Lenovo y el salto tecnológico con Motorola
La tecnología también fue blanco de adquisiciones. En 2014, Lenovo, el gigante chino de computadoras, cerró un trato con Google para comprar Motorola Mobility por 2.910 millones de dólares.
Esta jugada le permitió a Lenovo acceder a décadas de innovación desarrollada en EE.UU., fortaleciendo su presencia en el competitivo segmento de los teléfonos inteligentes.
Inversiones chinas en el sector automotriz
El sector automotor no quedó al margen. En 2010, AVIC, una corporación estatal china, tomó control de Nexteer Automotive, una firma con sede en Michigan dedicada a sistemas de dirección.
Desde entonces, fabricantes estadounidenses deben negociar con una empresa respaldada por el gobierno chino.
El desembarco en el mercado inmobiliario
Uno de los movimientos más simbólicos ocurrió en 2014, cuando Anbang Insurance Group adquirió el histórico Waldorf Astoria de Nueva York por cerca de 2.000 millones de dólares. Posteriormente, en 2016, amplió su presencia al comprar Strategic Hotels & Resorts por 6.500 millones. Tras la intervención del gobierno chino, estos activos quedaron bajo control estatal.
Otra operación destacada fue la del HNA Group, que en 2017 compró un rascacielos en Manhattan por 2.210 millones de dólares, consolidando así la influencia china en el mercado inmobiliario de lujo.
El sector aeronáutico también fue objetivo
En 2011, Cirrus Aircraft, fabricante de aviones privados, fue vendida a AVIC. Esta adquisición abrió las puertas a empresas chinas en un sector hasta entonces dominado por firmas estadounidenses.
Preocupaciones por el avance chino
También generó controversia la compra de Henniges Automotive en 2015, realizada en conjunto por AVIC y la firma de inversiones BHR Partners. Esta operación despertó alarmas por el posible acceso a tecnología con aplicaciones militares y automotrices.
Fuente: El Cronista – Actualizado el 4 de mayo de 2025