Así lo aseguró el investigador principal del Conicet, quien fue procesado en una causa que iniciaron los integrantes de la asamblea Jáchal No Se Toca. Apoyo de sus colegas en el CCT Mendoza.
Villalba: La ciencia es el perejil
El investigador Ricardo Villalba recibió el apoyo de sus colegas en el CCT Conicet Mendoza. Foto: Victoria Gaitán.
“En este momento, la ciencia es el perejil”. Esa fue la lectura que hizo el investigador principal del CCT Conicet Mendoza, Ricardo Villalba, a quien la Justicia procesó, embargó sus bienes y le prohibió salir del país. Dijo que el fallo distrae a la opinión pública y deja el campo libre para concretar modificaciones a la Ley Nacional de Glaciares, porque si se cuestiona el inventario de estos cuerpos de hielo, la norma no tiene razón de ser. Es decir, si la zona a proteger de actividades como la minería no está delimitada, entonces no habrá nada que proteger.
Villalba reconoció que atraviesa un momento doloroso. La razón es fácil de entender: el investigador de 61 años, que ocupó muchas horas en lograr que la sociedad –y en especial los legisladores– entendieran la importancia de cuidar los glaciares como un recurso estratégico, fue señalado por el juez federal Sebastián Casanello como una de las personas que posibilitó los derrames de cianuro en las minas Veladero y Pascua Lama, que opera en San Juan la firma canadiense Barrick Gold.
La causa la iniciaron representantes de la Asamblea Jáchal no se Toca, quienes cuestionaron la metodología con la que se hizo el Inventario Nacional de Glaciares. Su razonamiento fue que, como no incluyeron los glaciares de menos de una hectárea de superficie, eso permitió que Veladero y Pascua Lama siguieran funcionando al momento del derrame, ya que por ley no se pueden realizar actividades mineras o petrolíferas en las zonas donde están asentados esos cuerpos de hielo. El juez Casanello les dio la razón.
El investigador mendocino –a través del abogado que debió contratar– apeló la decisión. Si se acepta su reclamo, entonces una cámara deberá resolver si su procesamiento tiene o no fundamento.
Pese al mal momento, Villlalba recibió el apoyo de organismos científicos nacionales, internacionales, de vecinos, de ciudadanos. Hoy (lunes 4 de diciembre) los investigadores y becarios del CCT Conicet Mendoza hicieron un abrazo simbólico, lo respaldaron por su profesionalismo y, sobre todo, por su calidad humana. Entre las cientos de personas que se reunieron estuvieron la titular del centro, Elena Abraham, y una funcionaria de Medio Ambiente.
El perejil
Villalba reconoció que enterarse del procesamiento fue un shock, sobre todo porque en su escrito el juez no tuvo en cuenta ninguna de las razones científicas que le dieron para explicar por qué sólo incluyeron en el inventario a los glaciares de más de una hectárea.
“Relacionar los derrames con el tamaño de los glaciares no tiene sentido. Lo que más me golpeó es que uno se lo explica al juez, asumiendo que el juez va a razonar en esa forma, porque no fui sólo yo, sino muchos investigadores a dar su testimonio. Entonces uno ve claramente que hay una intencionalidad directa. No sé cuáles son los intereses que están detrás de esto, pero resulta difícil de entender que el juez proceda con un acto de tal nivel de injusticia”, aseguró.
El investigador explicó que lo más difícil de comprender es que la acusación provenga de grupos ambientalistas, con quienes se solidarizó siempre. Dijo que lamentablemente terminan siendo funcionales a los intereses de las empresas. “Si no está establecida el área a proteger, ¿para qué queremos una Ley de Glaciares?“, fueron sus palabras.
Villalba abonó la teoría de que la ciencia en este caso es un perejil y dio las razones. Explicó que el Instituto Nacional de Nivología, Glaciología y Ciencias Ambientales (Ianigla) es un organismo científico, no de contralor. Es decir que son las provincias –en este caso, San Juan– las que deben controlar a las mineras y evitar que se produzcan derrames, y que desde 2006 contaban con información sobre la existencia de cuerpos de hielo en la zona donde funcionan los emprendimientos. Sin embargo, no hicieron nada.
El investigador sumó otro dato: los representantes de las mineras fueron sobreseídos en la causa judicial que se inició por los derrames de solución cianurada y no hay ningún funcionario sanjuanino acusado. En cambio, el foco se puso en el Ianigla y en cuestionar metodologías científicas reconocidas a nivel internacional.
Villalba consideró que los cuestionamientos al sector científico tampoco son gratuitos, pero aseguró que, pese al mal momento, saldrán fortalecidos. “Debemos seguir firmes en nuestra posición, en que estamos en el camino correcto y en que la ciencia argentina está comprometida con la sociedad y con la protección de los recursos ambientales clave, como son los glaciares”.
Fuente: www.unidiversidad.com.ar/