“Estamos experimentando una muy fuerte recuperación del empleo, que en el tercer trimestre estuvo plenamente explicada por su crecimiento en el sector privado”, dijo el ministro de Economía, Martín Guzmán, en relación a la difusión de los datos del mercado de trabajo correspondientes al tercer trimestre del 2021 por parte del Indec.
El organismo oficial comunicó que el índice de desocupación se ubicó en el 8,2 por ciento, una baja de 3,5 puntos respecto al 11,7 por ciento. La merma también se verificó en el cotejo contra el segundo trimestre, cuando el desempleo fue de 9,6.
Guzmán celebró los datos y detalló que “se crearon 422 mil puestos de trabajo en el trimestre. Es consistente con lo vibrante que están resultando la recuperación de la producción y de la inversión”. Agregó que “la tasa de desempleo es más baja que antes de la crisis de la Covid-19 y también está debajo de los promedios de 2019, 2018 y 2017”.
En tanto, el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, subrayó que “la tasa de desocupación bajó por quinto trimestre consecutivo y alcanzó el menor nivel desde fines de 2017”. A través de su cuenta en la red social Twitter, Kulfas dijo que “los datos son alentadores y confirman lo que venimos señalando: estamos saliendo, de la mano del trabajo y la producción”.
El titular de la cartera de Desarrollo Productivo mencionó que “la baja de la desocupación se explica íntegramente por la mejora del empleo. Hemos recuperado todos los empleos perdidos por la pandemia”.
Por su parte, el Ministerio Trabajo publicó un informe en donde explica que “la mayoría de los indicadores que describen al mercado de trabajo argentino no solo reflejan una recuperación total de los efectos provocados por la pandemia de la Covid-19, sino que también muestran sensibles avances con respecto a la situación observada durante el periodo 2016–2019. El principal factor que promueve este nuevo escenario laboral no es otro que el notable crecimiento de la población ocupada”.
Sergio Chouza, economista de la Universidad de Avellaneda, consideró que “el número tiene un correlato con lo que se ve en la calle, con una recuperación que está por arriba de lo que se esperaba. Además subió fuerte la tasa de actividad, en línea con el repunte macro. Se sostuvo el empleo en el peor momento de la crisis y ahora de a poco empieza a subir a pesar de los desequilibrios macroeconómicos, que siguen siendo severos. El repunte es casi homogéneo en todos los rubros, con la incorporación del turismo y la hotelería al tren de la recuperación. Lo único que puede frenar esta dinámica es que la economía entre en una restricción muy severa de oferta de dólares”.
El economista Andrés Borenstein publicó en Twitter: “Buenos datos de empleo en Q3 (tercer trimestre). El desempleo más bajo que en Q3 de 2019, pero la PEA está medio punto más baja”.
En tanto, Hernán Letcher, economista del CEPA, dijo que “el desempleo está en el menor nivel desde 2015. La reactivación económica y las políticas de protección del empleo, lograron una sensible reducción de la desocupación. La tasa de actividad volvió a crecer llegando a 46,7 por ciento, cuando el promedio de los últimos 6 años previos a la pandemia era de 45,5 por ciento y se encuentra al mismo nivel que en el tercer trimestre de 2018”.
Daniel Schteingart, director del Centro de Estudios para la Producción, aclaró que “la mejora del desempleo no se explicó por efecto desaliento, dado que la tasa de actividad subió, sino por creación de empleo. La tasa de empleo (ocupados cada 100 personas) llegó al 42,9 por ciento y recuperó todo lo perdido por la pandemia”.
“Se recuperó el empleo en todas las categorías ocupacionales, aunque principalmente más en las más afectadas por la pandemia (informales y cuentapropistas), a su vez las más precarias. Hoy hay un poco menos de asalariados informales y un poco más de cuentapropistas que en 2019”, agregó Schteingart.