Los dirigentes gremiales advierten que Macri pretende doblegar al movimiento obrero y saben que la huelga será clave para la definición de esa pulseada. Por eso buscan garantizar la contundencia de la medida de fuerza.
La cúpula de la CGT está concentrada en el operativo que implica realizar con éxito el paro nacional de mañana. En el mientras tanto, sus directivos responden los dardos que les lanza el gobierno nacional aunque buscando no entrar en el juego del cruce de declaraciones flamígeras pensando en el día después. Entre los hombres que conducen la central obrera existe la convicción de que el presidente Mauricio Macri no solo pretende doblegar al mundo sindical sino que, de conseguir el objetivo, los utilizará para recuperar la iniciativa política con miras a los comicios parlamentarios de octubre.
Uno de los hombres fuertes de la CGT analizó ante Página 12 que Macri recuperó vigor con la marcha del pasado 1 de abril. “Le sirvió para recuperar aliento”, confió el dirigente sindical pero consideró que si se pone a medir una marcha con las otras que se realizaron en marzo “quiere decir que Macri ha perdido el equilibrio que se espera de un Presidente”.
Entre los triunviros de la CGT hay una convicción. Sostienen que todo lo que está haciendo el Gobierno está enmarcado en las necesidades electorales. “Tienen tres objetivos muy definidos para este año. Por un lado recuperar el centro de la escena política. Por otro, encapsular a los sindicatos y, por último, mejorar sus expectativas electorales”, aseguró uno de los conductores de la central obrera.
La prueba de la pérdida de equilibrio presidencial quedó expresada, según el dirigente sindical, en las declaraciones posteriores a la movilización del 1A: “Vio su marcha, se volvió loco y comenzó con aquello del choripán, los micros y las mafias. Un presidente debe estar por arriba porque debe gobernar para todos los sectores que conforman la sociedad y no solo para el que lo respalda”, indicó.
Si bien los triunviros habían acordado no responder la acusación de la existencia de mafias en el sindicalismo y lo consideran una “agresión propia de campaña electoral”, lo cierto es que uno de los conductores de la CGT, Juan Carlos Schmid, dijo que “nunca es bueno andar repartiendo responsabilidades o acusaciones al voleo. Eso normalmente es injusto. Me da la impresión de que un jefe de Estado tiene que sobrevolar todas las tensiones de la democracia. Eso es lo que hace un verdadero líder en el medio de las tensiones del sistema democrático, con los conflictos y las intermediaciones que obligadamente tiene que asumir”.
Schmid también dijo, en declaraciones radiales, que esperan poder habilitar un nuevo canal de diálogo luego de producido el paro nacional. En cuanto a la pérdida económica que implica la medida de fuerza que, según Macri, será de “15 mil millones de pesos”, Schmid señaló que todo paro provoca pérdidas “pero también es preciso revisar las enormes pérdidas por lo erróneo de algunas políticas económicas. Toda la dirigencia sindical aspira a que sea la última protesta. Nosotros con la protesta también perdemos, porque se siente en los compañeros que cobran presentismo, un plus por productividad. Por eso también aspiramos a que las protestas no se repitan”.
Pero en la sede de la CGT lo que se espera es que ese espacio de diálogo contenga ítems importantes como la recuperación de los puestos de trabajo perdidos y, sobre todo, la recuperación de la industria y el comercio. “Ellos hablan de que hay más trabajo pero son todos monotributistas o personal de casas de familia que volvieron a tributar o los repro que están implementando para las industrias textiles o del calzado. Lo que nosotros queremos es que haya más empleos de verdad”.
La organización del paro no implica solo la tarea con los sindicatos que integran la central obrera, también el contrarrestar las medidas que implementa el Gobierno para hacer fracasar la huelga. El dirigente sindical incluye también a los empresarios pero hace una salvedad: “No sólo quieren frenar el paro sino también quieren que Macri reaccione porque de lo contrario temen que regrese Cristina Kirchner.”
Más allá de si ese temor existe de manera real o sólo abarca a un sector, lo real es que hay entidades que concentran a los empresarios que ven con buenos ojos el paro nacional. Por caso,la Central de Entidades Empresarias Nacionales (CEEN) mantuvo ayer una reunión con la CGT para analizar el proyecto de ley de Compre Nacional.
El presidente de la CEEN, Francisco Dos Reis, justificó su adhesión al afirmar que “empresarios y trabajadores deben luchar en unidad para garantizar la producción y el trabajo nacional, que las medidas del gobierno intentan eliminar”.
La CEEN hará mañana un “persianazo” que, al decir de Dos Reis, es el método encontrado “para acompañar la lucha obrera y alertar sobre el rumbo al que llevan las políticas del Gobierno”.
Fuente: Página 12