POR CARIM LANZILOTTO
Todo indica que pese a los requerimientos de la Policía provincial y el COE, la Fiscalía de Instrucción penal en turno no colaboró con el procedimiento contra la fiesta clandestina en Cochangasta, y no autorizó el allanamiento del domicilio.
Hubo 138 personas detenidas por contravenciones, en este evento violatorio de las medidas sanitarias, a escasos metros de la avenida San Francisco, hacia el sur, muy cerca del cruce con Av. 30 de Septiembre y en la esquina de Campichuelo y Curapaligue, en un costoso inmueble de grandes dimensiones.
Tampoco colaboró Fiscalía Federal.
En consecuencia, la Policía y el COE no pudieron ingresar a domicilio, y tuvieron que negociar con los participantes y el propietario del inmueble, para desalojar la fiesta y pagar multa como contraventores.
Gran indignación en las redes sociales, por esta falta de colaboración por parte de la justicia ordinaria provincial y federal.
El concepto es que la justicia actúa “sólo contra los pobres”, y estos jóvenes universitarios de clase media, que violaron las normas sanitarias y participaron en una fiesta clandestina en pleno confinamiento por Covid, zafaron de toda sanción judicial.